El 4 de noviembre, primer martes después del primer lunes de noviembre (como estipula la ley), se efectuarán en los Estados Unidos las elecciones nacionales de medio término. Se elegirán 435 (cuatrocientos treinta y cinco) representantes –diputados- porque su Cámara se renueva totalmente cada dos años y 36 (treinta y seis) senadores.
El Senado –se renueva por tercios cada dos años- debe elegir 33 miembros pero se agregan 3 más porque Hawaii, Oklahoma y Carolina del Sur eligen senadores para bancas que quedaron vacantes recientemente.
Lo que quiero destacar hoy (espero poder dar una información completa en los próximos días) es un hecho que se me antoja curioso:
Como según las encuestas (yo no las creo pero bueno…) el Presidente Obama goza en este momento de una impecable impopularidad, casi ningún candidato demócrata está ansioso por recibir ayuda de la Casa Blanca. Es común que el Presidente salga a hacer campaña por los candidatos de su partido en las elecciones intermedias pero esta vez pocos están con ganas de recibir ese auxilio. Me hace recordar ese viejo chiste que tanto me hacía gracia en la infancia respecto al conscripto Gorosito y su sargento. Aquí sucede algo similar: es como si los candidatos dijeran, “los que nos quieran ayudar que den un paso al frente; Obama… vos quedate piola…”.
El Senado –se renueva por tercios cada dos años- debe elegir 33 miembros pero se agregan 3 más porque Hawaii, Oklahoma y Carolina del Sur eligen senadores para bancas que quedaron vacantes recientemente.
Lo que quiero destacar hoy (espero poder dar una información completa en los próximos días) es un hecho que se me antoja curioso:
Como según las encuestas (yo no las creo pero bueno…) el Presidente Obama goza en este momento de una impecable impopularidad, casi ningún candidato demócrata está ansioso por recibir ayuda de la Casa Blanca. Es común que el Presidente salga a hacer campaña por los candidatos de su partido en las elecciones intermedias pero esta vez pocos están con ganas de recibir ese auxilio. Me hace recordar ese viejo chiste que tanto me hacía gracia en la infancia respecto al conscripto Gorosito y su sargento. Aquí sucede algo similar: es como si los candidatos dijeran, “los que nos quieran ayudar que den un paso al frente; Obama… vos quedate piola…”.
No comments:
Post a Comment